helenismo en el siglo III a. C, los romanos quisieron estudiar el estilo, la composición y las formas literarias de los oradores griegos para dar brillantez a sus discursos. Desde comienzos del siglo II a. C se habían establecido en Roma muchos oradores griegos que enseñaban elocuencia en griego. A imitación de los griegos muchos oradores romanos se dedicaron a enseñar elocuencia.
De todos los oradores de estos siglos tenemos conocimiento por la obra de Cicerón, Brutus.
A principios del siglo I a.C. aparecieron en Roma diferentes corrientes oratorias:
- la corriente asiática: forma florida, ritmo oratorio, estilo rebuscado
- la corriente neo-ática: frases breves, sin artificios
- la corriente rodia: su promotor fue el rétor griego Molón de Rodas. Su estilo en un punto intermedio entre las dos corrientes anteriores. El principal discípulo de Molón fue Cicerón.
TIPOS DE DISCURSOS:
- Genus Laudativum: discursos pronunciados en ceremonias relacionadas con la religión
- Genus Deliberativum: se pronunciaban en una asamblea política, durante el ejercicio de un cargo público, con el fin de influir en un auditorio en la toma de una decisión política.
- Genus Iudicale: pronunciados ante un tribunal en defensa o acusación de un acusado.
PARTES DEL DISCURSO:
- Exordium (introducción): introducción del tema a tratar
- Narratio (narración): exposición detallada de los hechos. Tenía que ser breve y clara
- Argumentatio (argumentación): parte más importante del discurso. Dividida en dos partes:
probatio: defensa de cada uno de los argumentos a favor del orador
refutatio: refutación de los posibles argumentos en contra
- Peroratio (conclusión): parte final, destinada a ganarse a los jueces y al auditorio
Además en los manuales de retórica se presentan las cinco facultades fundamentales que un orador debe dominar para construir un discurso:
- inventio: búsqueda de argumentos apropiados y probatorio
- dispositio: distribución de argumentos en plan adecuado
- elocutio: arte de utilizar la expresión formal, palabras convenientes
- memoria: capacidad de recordar los argumentos y su formulación
- actio o pronuntiatio: lo relacionado con el aspecto físico al pronunciar el discurso, los gestos y el tono de la voz.
CICERÓN
(106-43 a. C) nació en Arpino, pequeña ciudad al sur del Lacio, de una familia de clase media; recibió su formación en Roma y la completó en Grecia. Vive en el medio siglo final de la República, época de grandes convulsiones internas: guerra social para conseguir la ciudadanía romana de todos los itálicos; las luchas por el poder entre MArio y Sila; la rebelión de los esclavos al mando de Espartaco; la conjuración de Catilina; la guerra civil entre César y Pompeyo, con la victoria del primero y su proclamación como dictador vitalicio.
Cicerón vivió todos estos hechos muy de cerca e intervino en alguno de ellos. Fue protagonista directo en la conjuración de Catilina que estalló durante su consulado y que él hizo fracasar.En la guerra civil apoyó a Pompeyo. César vencedor, lo perdonó pero él se retiró sus últimos años para dedicarse a la redacción de sus obras filosóficas. A la muerte de César, Cicerón volvió a la política, pronunciando sus Filípicas contra Marco Antonio. Esto le costó la vida a manos de los sicarios de aquél.
DISCURSOS DE CICERÓN
Los discursos de Cicerón se dividen en: judiciales y políticos.
Judiciales
In Verrem (Verrinas): los sicilianos encargan a Cicerón la acusación de extorsión y cobro injusto de impuestos contra su gobernador Cayo Verres.
Pro Archia poeta: defensa del poeta griego Aquías, al que se acusaba de usurpación del derecho de ciudadanía. En él hace un elogio entusiasta de las letras y de la poesía.
Pro Milone: defensa de Milón, que había dado muerte a Clodio en un encuentro entre bandas rivales.
Políticos
In Catilinam (Contra Catilina o Catilinarias): Catilina, candidato al consulado junto con Cicerón, no es elegido. Trama una conjuración para hacerse con el poder, incluyendo en ella el asesinato de Cicerón. Éste que está al tanto de todas las maquinaciones por la información que recibe de uno de los conjurados, pronuncia contra Catilina cuatro discursos en el Senado. La actuación de Cicerón le dio una gran fama y gloria, se le empezó a llamar "padre de la patria". Pero esta misma actuación, en la que mandó ejecutar a los cómplices de Catilina sin concederles el derecho de apelar al pueblo, le ha de ser más tarde funesta, ya que en ella se fundará su mortal enemigo Clodio para enviarlo al destierro, donde pasó un año de amarga desesperación.
In M. Antonium orationes Philippicae (Filípicas contra Marco Antonio): 14 discursos contra Marco Antonio, llamados Filípicas en homenaje a los discursos de Demóstenes contra Filipo de MAcedonia. Para muchos estos discursos fueron sus mejores piezas oratorias.
Pro lege Manilia o De Imperio Cn. Pompei: Cicerón apoya la propuesta del tribuno Manilio para que se conceda a Pompeyo el mando supremo de las tropas romanas en la guerra contra Miltríades.
Obras retóricas: además de sus discursos, Cicerón nos ha dejado las mejores obras sobre oratoria. Supo enseñar cómo se forma un orador y cómo se compone un discurso. Sus principales obras retóricas son:
Brutus: historia de la elocuencia en Roma, desde los orígenes hasta su época, precedida de un breve resumen de la elocuencia en Grecia.
De oratore: son tres libros que tratan de la formación del orador y la técnica del discurso. Cicerón opina que el perfecto orador ha de ser una combinación de tres factores: disposición natural, cultura profunda y conocimiento de la técnica del discurso.
Entre las obras de Cicerón también destacamos sus obras filosóficas en las que encontramos tratados políticos como De legibus, tratados morales como De oficiis, De amicitia, y tratados de religión como De natura deorum. Además hemos conservados cuatro colecciones de cartas de Cicerón: Ad Atticum, Ad familiares, Ad Quintum fratrem.